El día 4 de agosto a las 10.00 hrs. Omar Jofré, director del Movimiento Unitario Campesino y Etnias de Chile (MUCECH) asistió a una reunión del Cuarto Adjunto convocada por la Subsecretaría de Relaciones Económicas Internacionales (SUBREI). El motivo de la cita era informar sobre la propuesta de la Unión Europea acerca de la solución de controversias relativa a la Corte de Inversiones en el marco de la Modernización del Acuerdo de Asociación entre Chile y la Unión Europea. 

El Cuarto Adjunto, de acuerdo a la SUBREI “es una instancia (...) para informar, ya sea el inicio de una negociación comercial, o bien comunicar sus avances en el transcurso del proceso, a fin de generar un diálogo con las partes interesadas”. En este momento tienen cuatro negociaciones en curso: la Alianza del Pacífico y Estados Asociados, la Profundización del Tratado de Libre Comercio Chile-Corea del Sur, la Negociación del Acuerdo de Libre Comercio Chile-Ecuador y la Modernización del acuerdo de Asociación de la Unión Europea. Esta última es un proceso en curso que comenzó las negociaciones sobre su Pilar Comercial en 2017, las cuales siguen en desarrollo. 

En esta oportunidad el Cuarto Adjunto analizó el tratado de libre comercio entre Chile y la Unión Europea porque las partes consideran que a estas alturas sería bueno revisar algunos aspectos del tratado y ver si la incorporación de ellos va a afectar o no lo ya escrito. De acuerdo a información de la SUBREI, “en los primeros cinco meses del año, el intercambio de Chile con la UE alcanzó los US$ 6.147 millones. Chile y la Unión Europea tienen un Acuerdo de Asociación vigente desde el año 2003. Desde entonces, el intercambio comercial se ha expandido a una tasa anual promedio de 5%”.

Una de las propuestas de la Unión Europea (UE) es crear un tribunal para resolver conflictos en conversaciones bilaterales. Esto, a pesar de que no han habido dificultades entre la UE y Chile durante el tiempo que ha durado el acuerdo: “La Unión Europea ha sido bastante seria, sobre todo porque para Chile el convenio significó un tratado comercial que va aparejado con un acuerdo en relación al respeto a las normas democráticas y en relación al respeto a los tratados laborales que existen en Chile y en la UE”, opinó Omar Jofré, director de MUCECH.

De acuerdo al dirigente, el tratado también tiene un trasfondo comercial porque trata de  evitar que ocurra dumping, es decir, “que en un país estén haciendo precios comerciales más baratos que los de la contraparte a costa de sacrificar los salarios de los trabajadores, por ejemplo, o las normas medioambientales para poder competir en el precio. Entonces, mientras en un país los tribunales del trabajo están pidiendo el salario justo, en el otro eso está funcionando mal, la gente no tiene donde reclamar y están bajando los precios laborales para que el producto que se fabrica en esa industria salga barato al mercado internacional”, afirma Jofré.

Una de las aristas examinadas durante la reunión fue discutir si esto iba a afectar los derechos intelectuales o las innovaciones nacionales. En definitiva, fue una exposición de cómo está avanzando el debate y los planteamientos que han surgido desde la UE. La parte chilena ha dicho que está dispuesta a escuchar y hacer preguntas. Están en una fase de conversaciones sobre el Pilar Comercial del Tratado y los distintos puntos que pueden llevar a mejorarlo. 

En la instancia surgieron varias preguntas dirigidas a la autoridad, quienes a su vez las van a hacer llegar a la Unión Europea para que cada uno de los países que la conforma vea cómo responden. Omar Jofré destacó la importancia de estas negociaciones para el sector agrícola del país: “Para nosotros es muy importante como sector campesino porque se han tratado acuerdos muy importantes con la Unión Europea en la parte agrícola, ganadera y forestal, donde hay participación importante de nuestra gente. También es importante por los tratados que ya están firmados de respeto y reconocimiento a las normas democráticas de Chile y las normas laborales”.